Bienvenido a los rincones oscuros del cuartito del fondo de la mente (que dark lo mio). Disfrute su estadía... y si no vuelve... probablemente sea la mejor decisión que haya tomado en su vida... creame, me consta!

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Votar a los 16 y la política en la escuela

Bueno... si bien no es mi intención que este sea un blog político. A veces el estado de Facebook simplemente no alcanza para expresar un pensamiento. ¡Y como en cuanto a posts, la gran mayoría no son políticos, sigo dando la bienvenida a la diversidad!

La dificultad de expresar en un estado de Facebook, o Twitter (porque ahora incursiono en twitter para autopromocionarme! Sigame en @Aguaf_Pro), radica en que como ya he expresado, con el actual "modelo" de gobierno, tengo muchas coincidencias en intenciones.

Escuchando los discursos de nuestra presidenta, puedo decir que estoy de acuerdo con un montón de las cosas que propone como intenciones, pero como ya se ha vuelto costumbre, mis diferencias aparecen cuando hay que pasar de las palabras a las acciones.

En este caso, los últimos temas en boga vienen por el voto a los 16, y la política en las escuelas. Y estos temas son claro ejemplo de mis diferencias. Arranquemos de a uno.

Política en las escuelas. Estoy muy de acuerdo con que se enseñe política en las escuelas. Estoy muy de acuerdo con inculcar en las escuelas la inclusión política, la importancia del interés en los temas políticos e incluso de la militancia política. El problema para mi empieza en que estoy muy en desacuerdo, con hacer adoctrinamiento partidista (para un lado o para el otro) dentro de la escuela. Meter desde afuera el partidismo en la escuela para mi es lo mismo que si yo mandara a mi hijo a una escuela pública y láica, donde mi hijo tuviera la obligatoriedad de asistir a clases de Catequesis.

La formación política es importante, y en clases de Historia, y en clases de Cívica (o las que haya en las currículas actuales), deben darse a conocer la historia de los partidos hasta la actualidad, y no hasta 20 años atrás, hasta hoy. Pero después son decisiones del alumno decidir que toma o deja, como algo voluntario y no mandatorio. Después de todo, si a los 16 tiene edad suficiente para votar, es porque tiene un discernimiento político suficiente para no necesitar que alguien dedique horas de clases en alabar o menospreciar uno u otro partido.

Y eso me lleva al segundo tema, el voto a los 16. De nuevo digo que estoy de acuerdo con el voto adolescente. Pero no estoy en desacuerdo en decir que una persona de 16 años es suficientemente adulta para tomar decisiones que influyen en el futuro del país, y que para el resto de las cosas no.

El voto en la Argentina es obligatorio, y sigue siendolo, porque no tenemos una cultura de inclusión política. Si no, no escucharíamos a tanta gente que dice orgullosa votar en blanco, pero después igual se queja de lo hace o deja de hacer el que gana. La extensión a los 16 años del derecho, y LA RESPONSABILIDAD de votar, conlleva otras obligaciones políticas y sociales. Si soy adulto para votar, es porque soy adulto para influir en las decisiones que después alguien va a tomar para mi país. Por ende, si soy suficientemente adulto para ser responsable del futuro de un país entero, soy suficientemente adulto para ser responsable de mis actos, incluyendo los actos delictivos (entre otros caracteres sociales). El 99,9% de los adolescentes que simplemente no son delictivos (estadística compartida por el Senador A. Fernandez), no van a verse modificados por una baja en la edad de imputabilidad. Si vamos a darle a las personas desde los 16 años, derechos adultos, imagino sería más que beneficioso para todos, que tengan también responsabilidades y obligaciones adultas.

Sigo entonces manteniendo mis diferencias con el modelo, por el simple motivo de que las acciones lo son todos. Las palabras no dicen nada sin sustento. Me parece muy triste ver como celebramos la caída de una oligarquía, celebrando el nacimiento de una nueva oligarquía. ¿Después de todo, entre una y otra, que cambió realmente?

Antes un grupo empresario tenía poder, y lo ejercía para influenciar la balanza de la justicia a su favor. Ahora tenemos un grupo político que dice servir a la justicia, pero cada vez que le toca estar del lado acusado, usa su poder político para evitar responder a la misma. Ataca a los propios jueces y fiscales que una vez dijo defender, busca su reemplazo por otros, con "ideas políticas" afines, que básicamente hagan caso omiso de sus preiplos judiciales.

Antes un grupo empresario tenía poder, y lo ejercía para influenciar la balanza de la población a su favor. Ahora tenemos un grupo político, que repite exactamente la misma metodología, mientras sigue atacando a su opositor. Después de todo, el fútbol para todos se suponía que se pagara solo con la venta de los espacios publicitarios, los cuales, no son comercializados, y son utilizados para incluso atacar a gobiernos locales o provinciales. Sacan al aire programas enteros, durante o siguiendo sus momentos de mas rating, que no han dedicado minuto alguno a hacer autocrítica, o a encomendar una acción buena realizada por otro, y de hecho, dedica todo su tiempo a hacer exactamente lo mismo que el grupo empresario hacía en otros medios.

Antes un grupo empresario tenía poder, y lo ejercía para influenciar la balanza comercial a su favor, haciendo negocios nefastos que solo los beneficiaban a ellos. Ahora tenemos un grupo político, que lo único que modificó fueron los beneficiarios de estos negocios nefastos, hacia empresas "oficialistas", amigos y bolsillos propios, incluso financiando esos negocios con dinero público (después de todo, el ANSES le da plata a todos, menos a los jubilados).

Cayó una oligarquía empresarial, y fue reemplazada por una oligarquía política. Y yo todavía me pregunto ¿Qué cambió el nuevo modelo?