Navidad siempre
fue un asunto de familia. Al menos en la mía. Navidad significa para mi
juntarse en familia a celebrar, no una fiesta religiosa necesariamente, es una
oportunidad más de celebrar estar juntos, pasarla bien, reírnos. Una vez que
crecimos, las dificultades de la Navidad era si la pasábamos con nuestra
familia o con la familia política.
En mi familia nos
juntamos todos varias veces al año para cumpleaños o por ganas de juntarnos,
así que personalmente, nunca me hice mucho problema por perderme navidad con mi
familia, porque nunca falta mucho para el próximo encuentro de todas maneras.
Vivir en un país
donde no está tu familia me obliga a redefinir lo que significa la navidad.
Especialmente en un país donde se empieza a hablar de navidad en Agosto, donde
las primeras tiendas que despacito empiezan a poner en sus locales productos
relacionados con navidad a final de septiembre, y que una vez que pasa
Halloween en Octubre, es una sobredosis de productos de navidad. Las tarjetas
de navidad, los regalos, las decoraciones, las luces y decoraciones en las
casas y las calles, las radios progresan de poner una canción de navidad
esporádicamente a pasar al menos dos canciones de navidad por hora.
Personalmente me resulta molesto y tengo mi opinión, quizás fuerte, que siento
que nos tratan de atragantar con productos de navidad sin otro motivo que el
consumismo por el arte del consumismo. Pero tampoco está en mi lugar imponer mi
opinión y mientras la gente sea feliz, es una opinión muy irrelevante.
También en el
asunto está que para nosotros Navidad se celebra celebrando noche buena, no el
25, y acá el 24 nadie se entera, lo importante son el 25 y el 26 (el porqué del
26 les cuento en otro momento!)
Mi primer noche
buena (el año pasado), fue bastante inconsecuente. No hicimos nada, nos fuimos
a dormir a las 23.00 después de hablar con nuestras familias en Argentina y eso
fue todo. Los amigos que pueden, vuelven a casa para las fiestas, muchos viajan
a pasar la navidad conociendo lugares nuevos, algunos trabajan.
Esta va a ser
nuestra segunda navidad en Inglaterra y necesito redefinirla. No puedo volver a
Argentina, no puedo viajar por el mundo (en tiempos de cambios, los
presupuestos no permiten mucho una o la otra). Son pocos los amigos que estarán
acá. Necesito que navidad vuelva a ser un festejo, una celebración, más chica,
con otro menú, redefinida.
Si seremos solos
los dos o seremos más, lo sabremos más cerca de la fecha, la verdad que todavía
no lo pensé demasiado. El menú, quiero me recuerde la navidad en Argentina (por
lo que encargaré una lengua), pero adaptarla al clima y las opciones de acá (no
existe el pionono acá, o por lo menos nunca lo vi en ningún lado, pueden
creer?!).
No esperen
decoraciones navideñas (no lo hacía en Argentina y no quiero hacerlo tampoco).
En vez de un regalo a Ton, serán varios (más baratos jeje), como para hacer
volumen. Veremos como la redefinimos y con quien la redefinimos para adaptarla
a la coyuntura local.
Al final del día,
navidad es una fiesta y si hay algo a lo que me niego es a renunciar a una
oportunidad de comer mucho y tomar alcohol. Y esta navidad en Leamington Spa,
volverá a serlo. Promesa de campaña!
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